viernes, 27 de febrero de 2009

La Dama de la tarde

Es magnífica sin duda la fachada de la estancia "La Candelaria" ,un establecimiento rural de Lobos, en la provincia de Buenos Aires. Descubrir ese castillo en el que juegan tres estilos arquitectónicos, es un impacto para los sentidos. Entre araucarias,casuarinas,pinos , eucaliptos y plátanos aparece la magia del siglo XVI, custodiada por duendes de mármol que se eternizaron de la manos de algún escultor que les dejó la eterna quietud de un gesto.
La ví por primera vez un anochecer de Mayo, apenas pude descubrir su figura entre las sombras del bosque, que a esa hora , era yá casi impenetrable y se confundía con la noche. El frío de la agreste pampa bonaerence solo me invitó a buscar una taza de café junto a los leños del hogar del molino holandés, un sillón rústico pero amable me invitó a jugar con las pocas imágenes que la oscuridad me dejaba ver de ese parque y entrar en el silencio cómplice que me lleva siempre a buscar las historias de los lugares,los objetos y la gente.
El amanecer del día siguiente, me dejó ver al castillo entre las brumas grises de una mañana en el campo, cuando la niebla enmarca de misterio todo lo que rodea, la escarcha había dejado su rastro en el agua del arroyo que recorre el parque de diseño francés. Primero, recorrí parte de los jardines, descubriendo aromas vegetales , cantos de pájaros y sonidos agrestes, despues llegó el desafío , entrar al castillo y escudriñar todos sus secretos y rincones en busca de algún detalle que contara de su pasado y de las almas que lo habitaron.
Recorrí salones y alcobas, escaleras magníficas de mármol, madera y bronce, balcones invadiendo el paisaje, salas de juego solo permitidas a los hombres de la época, caireles de cristal, grifería de porcelana decorada a mano, vitreaux que contaban historias palaciegas y dejaban que la luz solar jugara con los efectos de un caleidoscopio, hogares contorneados por bellícimos frentes de chimenea, alfombras de países exóticos y muebles recuperados de quien sabe qué palacios europeos. El conjunto me recordó las imágenes un carnaval veneciano , donde el refinamiento, el lujo, la ostentación y el placer, seducen a los sentidos. Entre tanto, alguien relataba la historia de "La Candelaria", que comenzaba allá por la mitad del 1.800 cuando el propietario de las tierras (personaje nada romántico ni noble por cierto, un boticario de Lobos), había hecho una notable fortuna con la cría de ovejas y se había embarcado en el proyecto de la construcción del casco de la estancia. Su única hija, Rebeca, se casa con un "aceptable" pretendiente , quien será el que lleve a cabo la construcción del castillo, luego de la muerte de sus suegros. Los buenos dividendos aportados por la cría de la raza Merino Argentino, le permitió un sinfín de viajes a Europa para traer los materiales y muebles del castillo , así como la contratación de arquitectos y paisajistas del viejo continente. Rebeca disfrutó muy poco de todo esto yá que murió muy joven y de una extraña enfermedad. Su viudo ,vuelve a casarse y entrega su amor , su vida y la fortuna heredada a su segunda esposa, quien se convirtió en poco tiempo en una de las damas mimadas de la sociedad porteña. Tuvieron varios hijos, que como corresponde a la costumbre de la época se educaron y vivieron en Europa, solo regresando a la estancia para vender ganado y campos que solventaran sus gustos afrancesados.
A esta altura del relato, el lugareño que me narraba la historia, me contó que ningún huesped podía pasar más de una noche en la habitación que había pertenecido a Rebeca, "es muy común, (me dijo), escuchar el llanto de la niña o verla al anochecer vagando por el parque".....................
Decidí entonces ir a buscar en la capilla de la estancia la tumba de Rebeca (yá que todos los miembros de la familia descansan allí), y encontrar algún rastro de la "Dama-fantasma".
Recorrí la capilla, el mausoleo que está dentro de la misma y los alrededores del parque, con un solo resultado, la tumba de Rebeca no está,y si está no hay lápida o signo alguno de que su cuerpo esté en el predio de "La Candelaria".
"La Dama del atardecer", por cierto seguirá vagando por los jardines o dejando oír sus lamentaciones a los viajeros que pasen por el lugar....................
Hoy "La Candelaria" fue vendidad por los herederos de la familia a invercionistas coreanos que la explotan turísticamente.
Yo conocí el castillo y su historia de fantasmas, si podés , visitalo y de paso podrás conocer un lugar en nuestra llanura pampeana que parece sin duda, un rincón del valle del Loira................

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